Paseo de la Virgen del Puerto, 5
Metro: Príncipe Pío (líneas 6, 10 y R) o Puerta del Ángel (línea 6)
Caña (no hay botellín): 1,20€ (Amstel)
Tapas: mejillones a la vinagreta, chistorra o salchichas con papas, chorizo, salchichón, jamón para los privilegiados.
Especialidades: chuletón, rabo de toro, salmorejo, entrecot de lomo alto, lacón con cachelos a la gallega, chuletitas de lechal, secreto ibérico, chopitos, sepia, bravas, papas ali-oli, gambas al ajillo, ensalada de escalivada, pimientos de Padrón, tostas (de solomillo ibérico, de foie con cebolla confitada, de pimientos asados con ventresca, de escalivada con anchoas, de queso de cabra con cebolla confitada)...
Menú del día por 9€
Hace un par de años o así, la cafetería Linz cerró sus puertas. El hedor a muerte llegaba hasta el Burger King de la esquina. Viudas de militares, matrimonios in rigor mortis y maras nonagenarias merendaban, diariamente, croissants a la plancha lacerados por los rayos de sol que conseguían atravesar los diques de laca que a duras penas podían sostener pelambreras sulfatadas por décadas de desgaste celular.
Linz era, sin duda, una cafetería de
cuidados paliativos; el punto de encuentro de ancianos o, mejor dicho,
de viejos (basta ya de eufemismos), a los que ya sólo les queda la
glotonería de media-tarde como aliciente frente a la expectativa de una
muerte a cámara lenta. Pero los negocios no entienden de conmiseración.
Décadas de arraigo se difuminan en un simple contrato de traspaso. Y
así, con una firma en la línea de puntos y una transferencia bancaria,
Linz pasó a ser La Ribera de Manzanares. De entrada, los cambios tenían
buena pinta... se respetaba la barra elíptica en favor de la amplitud,
se quitarón telarañas y se modernizó el look
a pesar de ocurrencias algo abstrusas como meter una jodida farola de
la calle o maridar a Janet Leigh con la obra de Juan de Herrera.
Es
obvio que los nuevos responsables son conscientes de la privilegiada
ubicación del local junto al Madrid Río y la sala La Riviera. Esto
permite ciertas licencias a la hora de gestionarlo, ya que la gente
acaba entrando por mucho que traten de ahuyentarla. Pero es difícil
hacer peor las cosas con tanta potencialidad. Desde el principio, la
gestión ha sido un despropósito... atención esclerótica, cocina
ramplona, cañas mal tiradas, aperitivos roñosos, personal
desorientado... todo ello denota pereza, desmotivación, ausencia de
ideas, mezquindad de esfuerzos... por muy bien que les vayan las
cuentas, necesitan la ayuda de Chicote. No sacan ningún partido a un
Mercedes poniéndole el motor de una Rieju.


Eso
sí, todos los veranos se preocupan de poner en la terraza a una
camarera voluptuosa que haga olvidar lo que hay sobre la mesa. Este año
hay una morenaza trasatlántica con una popa tridimensional que es un
imán de fontaneros, encofradores y jubilados románticos. Triquiñuelas,
todas ellas, que despistan durante un rato... lo que tarda en
derretirse un helado.
No
sé si les va bien o mal, en cualquier caso les deseo lo mejor...
respeto la ley del mínimo esfuerzo, soy un ferviente practicante, pero
creo que tampoco haría falta mucho esfuerzo para convertir lo que ahora
es una patera en, al menos, una Zodiac.
En su página web se vanaglorian de ofrecer "la cocina y el trato que, los clientes, sin duda merecemos y esperamos". Si es así, merecemos y esperamos bien poco.... mejillones avinagrados.
Arnyfront78
En su página web se vanaglorian de ofrecer "la cocina y el trato que, los clientes, sin duda merecemos y esperamos". Si es así, merecemos y esperamos bien poco.... mejillones avinagrados.
Arnyfront78